Buenos Aires celebró el Día de la Independencia Argentina y el festejo de los 120 años de la apertura de la Avenida de Mayo, con un desfile cívico-militar, grupos de folclore y vehículos antiguos.
El acto comenzó en la plaza Lorea, en la intersección de la avenida con Luis Sáenz Peña, con la bendición e izamiento de la bandera y los acordes de “Aurora” y luego se entonaron las estrofas del Himno Nacional.
El clima agradable permitió gran concentración de público frente al mástil, donde también se encontraban organizadores y autoridades. En el palco, el presidente de la entidad organizadora, Manuel Pérez Amigo, acompañado por el Secretario de Derechos Humanos del gobierno porteño, Claudio Abruj y el titular de APTHGRA y UTHGRA, Dante Camaño, entre otras personalidades.
Uno de los oradores, Claudio Abruj, secretario de derechos humanos de la ciudad, señaló al hablar de la emblemática arteria, que es la primera avenida de la ciudad, la que “deja atrás las aldeas, la que habla de progreso” y que ahora es también “la casa o el escenario principal de todas las colectividades”. Destacó también a los inmigrantes, a quienes calificó como el gran motor que tuvo el país.
Por su parte Dante Camaño menciono que la Avenida de Mayo representa a la ciudad de Buenos Aires y al país, “ya que en un extremo está el Congreso y en el otro la Casa de Gobierno, pasando por la Catedral, el Cabildo y muchas instituciones, entre ellas la que tanto quiero: el sindicato gastronómico”. Explicó que la tradicional vía, más allá de la cultura, el turismo, las grandes instituciones, se identifica, fundamentalmente con el trabajo. “Con el trabajo duro, el serio, el trabajo honesto”, enfatizo el titular de los gastronómicos porteños.
Al referirse a la avenida dijo que siempre se va a buscar que sea un lugar del cual uno “se pueda sentir orgulloso” y reclamó para que “se pueda vivir en paz , donde podamos volver a los viejos valores”.
También se refirió a la figura de Torcuato de Alvear, de una “ familia muy antigua de Buenos Aires”, que inauguró esta avenida, hace 120 años. Destacó que esa familia “al revés de lo que vemos hoy”, sus integrantes murieron muy pobres. “ Expresó que “murieron pobres porque la política los empobreció”, remarcando la diferencia con el presente.
“Progresismo no es siempre lo que pensamos en el futuro, sino también recordar los mejores ejemplos que tenemos, los mejores valores y esos valores transmitirlos para trabajar”, reflexionó Camaño y pidió compromiso para que “ vuelva a su época de esplendor, para que no tengamos que sufrir el azote de la inseguridad, de la mugre, del destrato o de la insolencia, y que “cualquiera venga a protestar a nuestra casa, porque esta es nuestra casa”,
Luego, y ante el aplauso del público, se inició el desfile cívico militar, que avanzó por la avenida hasta Plaza de Mayo y que fue encabezado por la banda del Regimiento Patricios y seguidos por los granaderos y efectivos de la Policía Metropolitana. Cerca de cincuenta colectividades participaron del desfile y la gente, además, pudo disfrutar de una feria de sabores del mundo; espectáculos para niños y mucha música con invitados especiales.
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